miércoles, octubre 22, 2008

Bla

La suma de calorías esta haciendo estallar en mi ropa las costuras. Mi casa está de lo más cool, buena vibra mucho amor y siento que no hay nada que me agrade más. Los días son cortitos y me quedo con ganas.

La gente de afuera no hace más que mutarse porque otros se mutan, no hacen más que vivir de lo ajeno, de la mediocridad, de lo absurdo, de mentiras y también viven engañándose a si mismas, haciéndose creer que están por encima de todo aquello que parece lejano pero en realidad está más cerca de lo que pensamos.

Qué divino es la soledad…
me quedo sentada o acostada viendo cuanto se enriquece mi alma, escribiendo sobre las cosas que nadie escribiría, sacando las fotos que nadie va a sacar… preparándome para volver a la rutina que me ofrece todo esté mundo, para que en un futuro termine solterona y de veintitantos con mil arrugas y ojeras, viendo cantidades de caras que divagan entre la avaricia, codicia y el materialismo, dejando la humildad en último plano, sintiendo la grandeza mientras están parados sobre un mundo que se viene abajo.

A menudo me acusan de tener desinterés social, no eso caray! simplemente es un mundo que no comprendo por eso mejor wah! qué hablen y me hago sorda, y si tal vez eso es muy cierto… pero a la vez no siento que haya que meter todo en la misma bolsa, como quien dice.

No pienso ser pobre de alma y de corazón por llevar la ambición en la cabeza. Vos seguramente tienes tu bolsillo, tus cuentas y tu caja fuerte bien llenas, pero sos un pobre y miserable de corazón.


Tal vez ya he entendido que me encontraré gente de todo tipo, a hacer más grande mi tolerancia y… también desde ese día me importo un comino las retenciones.

Qué va! A mí me importa poco el qué dirán.

Yo no entiendo bien todavía que le pasa a la gente hoy en día.
Un día no tan lejano, abrumada por una presión escolar, me acosté para poder relajarme y tomar una decisión, ese día escuche mi propio corazón y sentí que nada había hecho por él en los últimos meses… decidí darme una oportunidad, decidí por mi misma. Un día no tan lejano, también volví a creer en el amor, volví a enamorarme y a sentirme como nunca antes querida, sentí que por primera vez alguien se dignaba a meterse los comentarios, los aplausos y loa abucheos de la gente, en el centro del culo
y se volcaba por completo a hurgar en mi corazón hasta encontrar a la persona que hoy soy.


Por ése alguien.


Qué es: UN PERFECTO ACTOR!
¡¡APLAUSOS!!

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